Dicen que viajando se fortalece el corazón...

ojalá que esto pronto suceda!

sábado, 31 de julio de 2010

VIAJE A BARILOCHE - VILLA LA ANGOSTURA (4ta parte) CAMINO DE LOS 7 LAGOS

En el camino de los 7 lagos...



El jueves 15 de Julio amaneció despejadísimo… será de los días más hermosos de este viaje… y sus imágenes quedarán grabadas en mi retina y en mi alma, llenándolas de gozo.

Desayunamos y emprendimos el camino de los 7 lagos. Esta ruta se divide en dos partes muy claras: la de ripio, llena de pozos, hay que transitarla entre 30/40 km por hora. Andarla con mucho cuidado. Como cuando en la vida el camino se presenta enrarecido. Hay que ser sumamente prudente y paciente, no? Y luego de 55 km comenzará la pavimentada. Mucho más grata para recorrer… pero tampoco sin apurarse, eh? Hay TANTO para celebrar en este camino ¡!!

Las orillas aparecen nevadas y la ruta despejada de nieve.
El lago Correntoso se presenta imponente y acompaña en gran parte de este primer tramo.

Enfrentados con el lago Espejo, al que admiraremos en todo su esplendor a la vuelta. Dicen que en verano el Correntoso es más cálido que el Nahuel… y aún más el Espejo para disfrutar de sus aguas. Este último tiene fama de ser el más reconfortante para un buen baño.
Como su nombre lo indica, el lago Escondido NO lo vimos a la ida… lo descubriremos a la vuelta!!! Increíble!!!

Respiramos al comenzar el pavimento.


Luego vendrán los que vienen de a dos: el Falkner y el Villarino.
De nuestra mano, el Falkner se presenta a nuestra altura y podemos apreciarlo muchísimo porque el camino da directamente a su costa. Y en ella claramente también se vislumbra un camping organizado para acampar ( en el verano!!! Ja)

Unos metros más estacionamos frente a la cascada Vullignanco para admirar y sacarnos fotos (como corresponde). Nos encontramos con gente de cerquita de Rosario, de la zona de Pérez, que viajan en sentido contrario. Cambiamos impresiones y seguimos cada grupo en su dirección. Ellos nos contaron que había nevado muchísimo en el Chapelco la noche anterior.


Y así seguimos viendo el entorno: a cada tramo, más blanco. Dignos paisajes de Dios.



Lago Villarino

El Lago hermoso no se ve desde la ruta de los 7 lagos, hay que adentrarse unos metros. Pero sí nos maravillamos con el Machónico. Volvemos a bajarnos del auto.


Lago Machónico

Espejado, luminoso, se ve inmenso… y una de las mejores vistas para detenerse y quedarse.



Ahí nomás, pasaremos desde lejos por el Meliquina… y por el cruce al camino que sube al cerro Chapelco… ya la cosa comienza a estar más transitada…
Y empezaremos a bajar, a bajar…
y el lago Lácar llegará transparente, azul, calmo… con una San Martin de los Andes cuidada y preciosa a sus pies.

Sonriente en este mediodía invernal. Luminosa, enmarcada de muelles y de construcciones que mantienen una coherencia con el entorno.



Es emocionante llegar, tanto como emociona el día y la oportunidad de haber recorrido este camino que tantas veces seguí en mapas y en relatos de otros viajeros. Ahora pude vivirlo.







No importa el frío. Al contrario. Se valora más el sol y la calidez de ese lugar en antítesis con las bajas temperaturas. Y en complemento.





Almorzamos en Dely. Y nos llevamos una grata sorpresa. Con el lugar privilegiado que tiene frente al Lácar, no se descolocan con los precios… bien por ellos. Y la comida es rica, y atienden bien. Mejor por ellos!

Luego recorremos la ciudad. La madera fluye. Tal cual se ve en las postales. Quizás un poco encajonada, pero todo parece de buen gusto.




Vamos retornando y la vuelta es imponente junto al lago. Junto a “los lagos”, junto a la nieve, con el paspartús de montañas… inmensidad que deleita…


Y aquí nos sorprenderemos cuando descubramos al “Escondido”… es que anda tan oculto él…

Y en el Espejo nos bajamos y nos des-pejamos con sus reflejos… bellísimooooo!!!




Lago Espejo







Y así seguimos… y volvemos a la preciosa Villa La Angostura y volvemos a nuestro querido Nahuel… una merienda rica en la pastelería de su centro. Nos antojamos de waffles de jamón y queso… sumamente recomendables!


Y de allí al hotel, al baño revitalizador, bajando las fotos que intentan plasmar algo de lo vivido…

Cena allí mismo, en el restaurante Viejo Coihue. Nada mejor que terminar un día tan especial en ese hotel, tocayo del lugar.


Hay tanto para celebrar en este camino...

martes, 27 de julio de 2010

VIAJE A BARILOCHE - VILLA LA ANGOSTURA (3era parte)

Y el Miércoles 14 amaneció dudoso. Desayunamos, reacomodamos bolsos y partimos en un remisse hasta la terminal de colectivos. Actualmente 2 empresas viajan desde Bariloche a Villa La Angostura: Albus y Vía Bariloche. El próximo que sale pertenece a esta 2da opción: $14 el boleto.
El camino es entretenido, el día será el más feíto (climáticamente) del viaje entero. La duración del recorrido es de 1 hora. 15´ aprox.


Esta será la vista que tendremos desde la habitación en La Angostura


Villa La Angostura es preciosa. Esto sí que me gusta demasiado. Va a pasar a formar parte de un triángulo de lugares que relaciono y perduran en mi corazón: Villa Gral Belgrano (Y Los Reartes), Mar de las Pampas y La Angostura. A los 3 volvería una y otra vez en busca de madera, de verdes, de aguas, de caminos, de Paz.

La terminal queda en el famoso cruce que ahora conozco en presencia luego de verlo en tantas fotos. Ahora sin intermediarios aparece ante mí conectando 3 caminos: el camino del cual vengo desde Bariloche, la ruta de los 7 lagos y el camino que va a al Puerto. A este nos dirigimos en taxi.

En esa zona histórica queda el Hotel La Angostura (construido en 1938, sólo 6 años después de fundada la Villa), donde estaremos 3 días y 3 noches. Maravilla de hotel, mezcla de tradición, calidez y madera.
En un entorno único, frente al Nahuel Huapí (otra vez junto a él!), entre cipreses y coihues en un parque verde y nevado.

interiores del hotel Angostura


Desde la terraza del hotel y desde sus ventanas puedo ver el lago y sus embarcaciones en la bahía Mansa. Y allí, desde la vereda de enfrente, se alza erguida la península de Quetrihué. Dentro de ella se encuentra el Parque Nacional Los Arrayanes. Y el famoso bosque.




Ese miércoles, luego de llegar, nos aprontamos a alquilar un auto. Nos tocará un Suzuky negro que nos acompañará en esos 3 días.

La decisión de esa primera tarde en La Angostura fue subir hasta el Cerro de esquí Bayo, a 6 km.
Es muy lindo el camino, y en ese día destemplado, se nos presenta el Bayo muy nevado, haciendo las delicias de los esquiadores.

El Bayo es pequeño comparado el Catedral pero muy “abarcable”.

Almorzamos en el restaurante de allí: Barsovia, al pie de las aerosillas. Lindo, lindo todo.


Hasta nos cayeron algunos pequeños copitos de nieve.





Del Bayo bajamos y fuimos aprovechando los distintos miradores que ofrece para sacarnos fotos. Y nos volvemos a maravillar en cada curva.




De allí cruzamos toda La Angostura y vamos hacia el lago Correntoso y el lago Espejo, muy cerca de la Villa y ambos en ruta pavimentada.
El día no acompaña para apreciarlos; por suerte, tendremos revancha en otro momento.


A la vuelta paramos en el mirador Inalco sobre el Nahuel.



Nos vuela el viento y el frío nos atraviesa,




pero tengo mi alma llena de cosas hermosas.

Y después hacemos centro que a mí me encanta: mirar artesanías, preguntar precios, pararme en cada vidriera. Fer me tiene paciencia. Y después reclama la merienda… jaja. En esa vuelta al centro, nevará condimentando el paseo.
Entramos a tomar una taza de chocolate caliente para calentar el cuerpo.

Volvemos al hotel. Bañito. Cena allí mismo (el hotel La Angostura tiene su propio restaurante: Los Coihues) TV en la sala de estar… y a la cama que mañana nos esperan los 7 lagos… o más?

La Angostura, Villa y hotel... gracias por recibirnos!