Relato de Viaje a Villa General Belgrano - Los Reartes

El 1 de abril de 2010 llegamos a Villa General Belgrano, luego de un viaje donde nos retrasamos como 2 horas porque hubo un feo accidente en ruta y se dificultó llegar… pero llegamos (gracias a Dios)
Por primera vez nos hospedamos en la posada Chamonix, en el camino desde la Villa hasta Los Reartes… nuestro amado Reartes, donde elegimos pasar nuestras vacaciones de verano 3 veces (2007/2008/2009), en las cabañas Las Princesas, junto al río que le da nombre al lugar.
Pero este es un viaje distinto, venimos en pareja. Nuestros hijos adolescentes no quisieron acompañar en estos días de semana santa. Así que nos pareció muy conveniente venir solos. Y la posada Chamonix resulta ideal para eso. Cálida, preciosa, predomina la madera y la piedra. Un restaurante exquisito. Una pileta grande desde donde se divisa una panorámica bella de las sierras chicas. Un entorno natural, acogedor, maravilloso.
Me fui, luego del almuerzo de riquísimas ensaladas, a recostarme en la reposera y refrescarme en el agua de la pileta exterior. Totalmente disfrutable el combo.
A eso de las 16 hs partimos con el mate hacia el río Reartes, antes de cruzar el puente San Ignacio tomamos el camino de ripio que se inicia a la derecha (recordar que venimos desde Villa General Belgrano) Cuántos recuerdos nos trae ese caminito. En el año 2002 descubrimos este sitio (también en semana santa) y nos enamoramos de ese entorno de río y verdes pinares. Esa vez nos alojamos en las cabañas Juan Salvador, muy lindas.
Pero ahora continuamos y pasamos el viejo hotel (siempre tan opacado cuando, según Fer, mi marido) tiene una vista privilegiada!
Pasamos delante del querido complejo Las Princesas, donde siempre Daniel y su familia son tan cálidos y atentos, brindando servicios y comodidades en aumento, año tras año.
Este día, pasando el parador La Curva, nos bajamos en Chiringuito y la tarde cerró hermosa en un clima inmejorable, dentro de un entorno que amo, junto al hombre que amo… y sintiendo lo que siento siempre en este sitio: que es mi lugar en el mundo.

Río Cristalino que suena, variantes de verdes sobre los que el sol juega y muestra una naturaleza en esplendor, piedras mojadas que acompañan esta geografía, arena, cielo despejado… alma feliz!!!
Luego de un bañito reconfortante, a la nochecita partimos a la Villa y cenamos en Blumen haus que atienden rápido y sirven rico. El postre lo postergamos para saborear después unos chocolates en Capilla Vieja…
Y a la camita a descansar...


El 2 de abril (viernes santo)nos pusimos el despertador para ver el amanecer desde el balconcito de nuestra habitación. Pero luego de una noche esplendorosa de luna, aproximadamente a las 4 de la madrugada, se largó a llover con todo!!! Así que cuando sonó el despertador, apagué y seguí durmiendo un rato más… cuando me desperté un poco más tarde, Fer me dijo que mire por la ventana, estaba nublado y era también impactante ver las nubes atravesando las sierras. Saqué varias fotos.
Bajamos antes de las 9 a desayunar… desayuno buffet de los que no falta nada (hasta el huevo revuelto)

Después nos fuimos a la Villa a mojarnos!!! Jaja Intenté comprar regalo para mi hna y no me convenció nada de lo que vi, y había tejidos preciosos… pero muy caros. Fer se compró una remera, compramos esencias y velas en la posada de los duendes (un clásico ya en cada viajecito por estos lares) y luego elegimos chocolates para llevar a los chicos (en capilla Vieja… riquísimos!) Nos empapamos, tomamos cafecito al final de una galería. Antes descubrí un local que vende pulloveres de Genoa de Mar del Plata… cómo me gusta! Pero no quiero gastar en eso jaja
Volvimos a la posada, nos pusimos las batas y pantuflas que te dejan en la

habitación y partimos a la pileta climatizada, agua calentita, ambiente agradable, y con sonidos y aromas acordes… charlamos con una pareja de Haedo, muy agradable. Luego descubrí la revista Líderes. Muy buena!

Almorzamos en el restaurante a las 16, primavera de pan árabe y luego probé un strudel de ricota acompañado con bocha de helado de vainilla: exquisito!
Me conecté a Internet, nos recostamos un ratito y partimos a la Villa a pasear en al auto.

Paramos en “La Nueva casa de Dina” y cenamos fondeau de queso con muchos ingredientes. Un lugar cálido y acogedor con nueva dueña.

Ya no llovió más (por suerte).

Esperábamos al día siguiente volver al buen tiempo… y poder caminar y disfrutar del río!!!

El 3 de Abril de 2010, un sábado de gloria propiamente… Nos despertamos tipo 7.30 y vimos un amanecer dudoso desde nuestro balcón. Desayunamos junto a la ventana del comedor (primera vez que conseguimos mesa junto a la ventana) y aprovechamos el solcito para bajar al parque junto a la pileta, y sacarnos unas fotos.


Luego de pedir agua para el mate, partimos por la ruta 5 hasta la entrada por Ciudad del Parque, lo que nos hizo entrar por una hermosa arboleda, y abordar Los Reartes desde el lado opuesto al que siempre entramos. Cada vez que venimos, observamos que se siguen construyendo muchos complejos de cabañas.
Entramos por el caminito junto al río y bajamos con nuestras reposeras al parador La Curva (siempre con linda arena), estuvimos junto al río un par de horas. Me tomé un tiempo para meditar y energizarme con el agua, con la vista de los pinares y de las rocas. Estaba correntoso el Reartes, supusimos que por la abundante lluvia de ayer. Nubladito de a ratos, otros con un solcito lindo que daba para quedarse en malla. Charlamos con Fer, tomamos mate, filmamos, sacamos fotos, nos reímos, nos quedamos en silencio simplemente contemplando… las horas se pasan junto al Reartes y ese transcurrir es agradable, fluido, sereno.

Amo ese lugar desde el preciso instante en que llegué, y supe que durante años me había perdido algo… y agradecí (y agradezco) infinitamente, año tras año, la posibilidad de volver. Hoy saqué cuentas que desde que lo descubrí en el 2002, volví todos los años (salvo el 2003) y siempre mi alma se llena de regocijo al ver mi paisaje, al encontrarme formando parte de él.

Después que el tiempo pasó pausadamente, volvimos por la ruta y paramos en un local a la entrada de Villa General Belgrano, local compartido por los chocolates de Capilla Vieja y los tejidos al telar de Rosina Morgando. Unos tejidos preciosos. Compré dos pashimnas, una para mi hna por su cumpleaños, y otra para mí. Y algunos chocolates para picotear. Mmmmm.
Volvimos a la posada, comimos unos sándwiches, elegí uno de leberwush, y Fer uno de crudo y queso. Luego él partió a la pileta climatizada, y yo a revisar mi correo.
Cuando Fer volvió de la pile, previo baño, partimos hacia la Villa.

La encontramos muy alegre y muy llena de gente. Recorrimos locales, la feria artesanal, caminamos por callecitas más apartadas y terminamos compartiendo torta de chocolate en Blumen. Compramos cervezas para mi hno como regalito de cumple (rubia y negra) y volvimos a Chamonix, mientras en las calles de la Villa sonaba “Barrilito, barrilito…”
Reservamos mesa para la cena y fuimos al cuarto a descansar y mirar tele. La mucama nos atajó en la puerta para obsequiarnos huevos de Pascua (el día anterior habían sido alfajores)… esos detalles divinos!
A las 22 bajamos a cenar, la comida se hizo esperar, aunque debo reconocer que estaba muy rica. Pero estábamos muuuy cansados.
Luego de preparar los bolsos, caímos rendidos terminando el sábado de gloria…


El Domingo 4 de Abril iniciamos la Pascua tempranito, admirando por última vez el amanecer sobre las sierras. Deleitamos el desayuno junto a una de las ventanas que tiene la mejor vista… juntamos los bolsos y partimos. Partimos con la firme convicción de volver.
La vuelta la hicimos por la ruta pcial 6, con una sola parada en Justiniano Posse; luego de Casilda tomamos autopista hasta Rosario. Llegamos antes de las 15 hs (habíamos salido a las 9 aproximadamente) para compartir el almuerzo Pascual con nuestros hijos. Fin del viaje.